PLANTACIÓN DE LA VID

VENDIMIA 2015

Si tienes interés por la agricultura, los cultivos propios, la obtención y elaboración de productos naturales,

por la enología, etc. lo mejor es que hagas lo imposible por disponer de un terreno para dedicarlo a huerto familiar, y dentro de él reserves una superficie para plantar unas cuantas cepas de vid. De este modo, además de realizar una actividad saludable al aire libre, podrás elaborar tu propio vino. Ambas cosas -agricultura y vino- son tan antiguas  como la humanidad.

Nuestra pequeña viña del Rincón de la Isidra está plantada en un marco de 5m x 5m, ya que cuando se hicieron los hoyos pensábamos poner árboles frutales en toda la parcela. Pero, antes de terminar con la plantación de todo el conjunto, decidí dejar tres hileras de hoyos para plantar vides, pues consideré que ya había suficientes frutales.

El marco se modificó dejando los 5m entre hileras y haciendo un nuevo hoyo entre cada dos, quedando pues a 5m x 2,5m.

Han sido muchos los amigos que me han animado a modificar este marco de plantación, aludiendo a que 5m es demasiada distancia entre calles (hoy se plantan a 3m x 1,5m) y ello hace que no se aproveche correctamente el suelo. Decidí hacerles caso.

Pero había un problema casi insalvable: el tractor que utilizamos no podría realizar labores en una calle de 2,5m. La solución pasó por plantar las nuevas vides a 1,5m de las ya existentes. 

Con ello quedaban calles de 3,5m para el paso del tractor y otras de 1,5m. en las que se utiliza una motoazada.

PROCEDIMIENTO A SEGUIR

No nos vamos a ocupar aquí de todos los detalles para una gran plantación, sino de unos consejos básicos para unas pocas cepas dentro de un huerto familiar.

Señalando la hilera

Antes de nada deberás llevar a cabo un replanteo de lo que piensas hacer, de las unidades que vas a plantar, de la variedad y del terreno que ocuparán. Para ello, con la ayuda de una cuerda, trazaremos una línea recta. A lo largo de esta línea haremos marcas equidistantes para la futura disposición de las cepas. Es recomendable utilizar un pequeño listón, caña o palo con la mediada deseada. Se clavará una varilla fácilmente distinguible en cada lugar para hacer los futuros hoyos. Si deseamos poner más hileras, sólo tenemos que realizar lo anterior en paralelo a esa hilera matriz.

Ahoyador a gasolina

Los hoyos se pueden hacer con azada o con un ahoyador mecánico o barrena manual. No serán inferiores 35 cm. Una vez realizados conviene volver a colocar la cuerda a lo largo de la hilera de hoyos, con ello conseguiremos que nuestras plantas queden perfectamente alineadas.

Barbados de vid injertada

 Los barbados, plantas de vid ya injertadas sobre pie de americana y con raíces, son nuestras futuras cepas. Antes de insertarlos en los hoyos debemos de examinarlos, desechar, si los hubiera, los que tengan mal aspecto o pocas raíces, y proceder a cortarles 1/3 de las puntas de las raicillas.

Los colocaremos todos y cada uno siempre al mismo lado de la cuerda, dejando el injerto a unos 10 cm por encima de la horizontal del terreno.

Posición del barbado en el hoyo

En nuestro caso aprovechamos los hoyos para, a la vez que situábamos los barbados, instalar el riego subterráneo vertical.

Detalle del riego por goteo

Regamos y esperamos a que el agua desaparezca.

Colocación del tutor

 Tras aportar un  poco abono orgánico y clavar un tutor cubrimos con tierra.

Compactado del terreno

Compactamos con firmeza pisando alrededor de nuestra planta.

Aspecto final 

A continuación cubrimos el injerto realizando un 
pequeño montículo de tierra sobre el mismo. Es muy importante que el extremo superior de la planta quede unos tres centímetros bajo tierra, con ello se evita que los vientos y el frío los deterioren (todavía estamos en febrero!).

Si hay riesgos de daños por conejos, liebres o mascotas propias, conviene protejer las plantas para evitar que muerdan sus brotes o lo pisoteen.

Injerto brotando en primavera

Pasasos unos tres meses ya podemos observar si nuestras plantas han arraigado correctamente o no.

Cepa a los 5 años de su plantación

Tendremos que esperar un año para comenzar a “formar”, mediante la poda, nuestras cepas. Y más de cuatro años para elaborar  nuestro primer vino…, si todo va bien.

Siempre se ha dicho que quien tiene una viña tiene un tesoro. Espero que estos mínimos apuntes sean suficientes para llevar a cabo la creación de ese tesoro que tanto deseabas.

No dudes en preguntar sobre las dudas que te surjan.